jueves, 23 de noviembre de 2006

“El mi amor”


Foto: Experimento para la sobrevivencia

Pantalón de franela a cuadros, Homeros en los pies. Pinta de ama de casa recién salida de la cama. Brincas y brincas de felicidad, te sientes, a parte de calientita, cómoda. Y la hilera de dientes perfectos me lo dice con tu sonrisa. Tanta la dicha que luego te quedas dormida.
El capítulo se repite luego a la hora de almuerzo. La mesa servida, vos con apuro y contenta de ver que a penas llegas el pollo a la naranja, mi única habilidad, sale calientito hasta tu boca. Vuelves a saltar de alegría y la misma sonrisa se dibuja y me ilumina.
Mi amor, “el mi amorrrr” me dices y me vuelvo loco de alegría. La confianza ya se volvió camaradería.
Vemos el reloj y tenemos como una hora. Afuera llueve y antes de acurrucarnos cierras la cortina. El show hoy no es público.
El afán hace que las horas vuelen y extendemos la cama con prisa.
Este ya no es mi cuarto. Ya tienes tu rincón en la cama, tu olor en mi almohada y casi, casi, el control en la mano. Yo solo me adapto a mi nueva vida. Que gusto que vuelva la vida.
Todo es mejor más cerca.
Creo que son los cables y la tecnología los que juegan al teléfono descompuesto y fabrican nuestras riñas.

No hay comentarios: